LA SERIE DEL CARIBE LLEGA GRACIAS A RUAMAR
El doctor Puello Herrera y su legado histórico
Por Horacio Nolasco
El doctor Juan Francisco Puello Herrera ha sido en los últimos 30 años el arquitecto de un evento que le ha puesto saco y corbata a La Serie del Caribe.
El brillo del espectáculo deportivo que une cada año a los campeones e invitados de las principales ligas de la cuenca del Caribe se ha forjado con un esfuerzo extraordinario. En 1990 y 1991 la serie tuvo que trasladarse a Estados Unidos por problemas económicos que detuvieron el desarrollo de la misma.
La experiencia de esos dos años en USA no fue la más halagüeña, incluso en 1991 a Puello Herrera le habían dicho que sería el último comisionado, el elegido para realizar las honras fúnebres a un moribundo llamado Confederación de Béisbol Profesional del Caribe (CBPC).
Tras los tropiezos se logró en 1992 un acuerdo en San Diego. El fin de dicho pacto era evitar las pérdidas económicas de los equipos o ligas participantes; dotando a la CBPC de todos los instrumentos legales y a la vez garantizar el futuro de la serie. El equipo técnico y la asesoría de más de 15 años del doctor Ysócrates Peña Reyes han sido elementos claves en el desarrollo de la Pequeña Serie Mundial.
Luego de la estabilidad que permitió desarrollar la fiesta caribeña en cada uno de los países miembros se presentaron los acontecimientos políticos de Venezuela en 2018 y 2019. El primer año se tuvo que mover la sede a México y el siguiente fue peor, teniendo que desarmar toda la estructura de meses de trabajo y trasladar la serie a Panamá apenas una semana antes del inicio del torneo.
En el 2020 nos llegó el covid. Con Mazatlán como sede en el 2021 se promedió 3 mil fanáticos por partido y la final de Águilas Cibaeñas y Criollos de Caguas fue presenciada por apenas 4 mil parroquianos.
Para el 2022 el espectáculo caribeño retomó su clase. Los Gigantes del Cibao, sin ser uno de los tres grandes equipos dominicanos, sirvieron de anfitriones e hicieron del Estadio Quisqueya una fiesta a la altura de los magnos eventos. Ni hablar de la serie del 2023, efectuada a todo nivel en dos estadios venezolanos.
Este año se logró una aspiración de 31 años del doctor Puello Herrera: montar una Serie del Caribe en un estadio de Grandes Ligas. Se firmó un acuerdo que permitirá efectuar de nuevo el evento antes del 2030 en el estadio LoanDepot Park.
El nuevo récord de asistencia en un partido (35,972) entre Dominicana y Puerto Rico el sábado pasado se suma a una serie que, pendientes los juegos del miércoles, las semifinales y final, ha llevado más de 200 mil fanáticos y superará ampliamente el récord de 247 mil aficionados en Caracas 2023.