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La industria de refrescos se compromete a reducir el azúcar de sus bebidas un 10% de cara a 2020
Los consumidores están adoptando una dieta cada vez más saludable, lo que hace que las marcas tengan que variar sus estrategias para seguir resultando atractivas. La Feria Alimentaria 2018 celebrada ayer en Barcelona, fue un reflejo de los cambios que está adoptando tanto el sector de la alimentación como el de las bebidas.
En los más de 4.500 stands que conformaron la feria, se pudo ver como algunos fabricantes están apostando reformular sus productos, añadiéndoles menos azúcares o adictivos. Otros directamente han optado por ofrecer nuevos productos alternativos.
Este segundo camino es el que han preferido elegir los fabricantes de los refrescos. Desde los años 40 marcas como Coca-Cola o Pepsi sacaron al mercado variantes de sus populares bebidas sin azúcar.
Actualmente este tipo de bebidas suponen un gran volumen de negocio para estar marcas. A Coca-Cola le reporta el 39% de las ventas. Por detrás, con una escasa diferencia se sitúa Pepsi (37%) y Suntory Schweppes (35%).
Además, la industria de los refrescos ha reducido el azúcar del resto de sus bebidas. Según un estudio de Anfabra, la patronal del sector, entre 2005 y 2016, las bebidas refrescantes contienen un 28% menos de azúcar, lo que supone una disminución notablemente superior en comparación con el resto de países europeos (12%).
A pesar de los esfuerzos que está haciendo este sector, la industria de los refrescos es una de las industrias más nombradas en la polémica sobre cómo frenar la obesidad en España. Por ello, John Rigau, presidente de Anfabra anunció ayer que de acuerdo al compromiso firmado con el Ministerio de Sanidad, la industria disminuiría sus niveles de azúcar un 10% más de cara a 2020.
El presidente de Anfabra también señaló su descontento ante el impuesto especial que ha creado la Generalitat para el mercado de refrescos: “Se nos quiere demonizar con impuestos específicos, pero somos una categoría que sólo representa el 2% de la ingesta de calorías, por lo que no es una solución a la obesidad o la diabetes; en España no tenemos un problema de sobreconsumo de bebidas azucaradas”.
“El impuesto no lo hemos notado; en Cataluña se han vendido más litros en 2017 que en 2016″,expresó Josep Puxeu, director de Anfabra. Igualmente, admitió que las bebidas sin azúcar son las que más están creciendo. El año pasado, el consumo de esta clase de refrescos aumentó un 4%.
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