NACIONALES
El Covid y la irracionalidad de nuestros barrios

Por Rafael Santos
El alto grado de irrespeto, así como la insensibilidad mostradas por las grandes mayorías de nuestros sectores populares (barrios), es una triste realidad que frena los avances a los que bien pudiéramos llegar para la disminución y/o erradicación del Covid-19.
Por más que nuestras autoridades sanitarias, en este caso y de mi provincia Hermanas Mirabal, representadas en las personas de los doctores Francisco Eligio Duarte y Pedro García, el primero de la Dirección Provincial de Salud y el segundo de la Gerencia de Area, adscrita a los Servicios Nacionales de Salud, quieran mostrar los logros en esta materia, estos no pueden rendir en sus programaciones si la colectividad no coopera.
Si la situación covidiana se sale del control, sería muy fácil quemar gomas, atacar autoridades con insolencias, muchas de ellas hasta impronunciables…. por aquellos que hoy día y en actitud desafiante han estado promoviendo la irracionalidad en base a una desobediencia que raya en el espanto y nos hace ver como sociedad, entes mucho más vulnerables ante la epidemia que tenemos por delante.
Muchos en nuestros barrios, principalmente los jóvenes, adolescentes y aún grandes cantidades de adultos, están mostrando una actitud no solo poco elegante sino hasta peligrosa para mayores adultos y personas con problemas de salud, a los cuales si los ataca el Covid, los mismos son muy propensos a tener una muy alta probabilidad de muerte, y eso, muchos de los que de manera irresponsable actúan lo saben se sobra, lo que pasa es que son insensible ante el grave peligro que corremos como sociedad.
Da pena, vergüenza y hasta terror, ver las imágenes que se muestran principalmente los fines de semana por las diversas redes sociales, en donde se observan jolgorios y verbenas multitudinarias, las cuales nada tienen de envidiable a un mitin de cierre de campaña política, en donde el alcohol, las jukas y una vaina llamada Vappers son los cuadros que de manera impotente observamos quienes queremos resguardar nuestra salud y la de nuestros familiares.
Creemos pertinentes que ya es hora de que quienes promueven el triste accionar del irrespeto a las medidas sanitarias y a la buena convivencia, deben de ponerle un pare a esto y en vez de la promoción a la negatividad, piensen en sus padres, abuelos y en aquellos que con condiciones especiales de salud podrían estar entre la vida y la muerte por la irresponsabilidad que se observa.
Es hora de que se paren muchas de las provocaciones que vemos cuando algunas de nuestras autoridades van a tratar de imponer el orden. Salcedo no es tierra de nadie todavía, somos una ciudad que quiere paz y para ello es necesario que cada quien aportemos nuestro granito de arena, o de lo contrario, esos que de manera irracional desobedecen las medidas sanitarias, serán los responsables de los futuros contagios y posibles muertes de nuestros mayores con condiciones especiales de salud.