NACIONALES
La Inteligencia Política durante los llamados de tiempos “muertos” y tiempos electorales
POR: RAFAEL SANTOS
La Inteligencia se define entre otras cosas, como la capacidad que tiene la persona para analizar, reflexionar, escuchar y después de esto sacar las mejores conclusiones para de esta manera actuar y obtener lo esperado.
Ahora bien, basando este precepto para llevarlo a la política, podríamos colegir que la unidad de estos conceptos es lo que debe primar en una sociedad como la nuestra, la cual busca más que todo el desarrollo integral de sus conciudadanos.
Sin embargo, en nuestro entorno, tenemos políticos los cuales ponen en ejecución un tipo de inteligencia que no es tal, sobre todo en los tiempos electorales, que es en donde los que se hacen llamar político (que repetimos más que eso son vividores y trepadores que usan muchas veces la miseria del ciudadano para escalar posiciones) la dejan salir de su escondite cerebral para engatusar a la incauta población la cual se deja seducir por unos suculentos discursos que ni ellos mismos se los creen.
Es en los tiempos electorales, en donde vemos que muchos se mudan a los pueblos, usando estrategias muchas veces convincentes para junto a un elaborado programa de compra de conciencia tanto a lo interno como a lo externo de su partido, logran » amarrar» a trasnochados » dirigentes » los cuales les hacen las veces de lobista que con un ceron bien lleno de dinero y promesas logran en la mayoría de los casos, repetimos, aprovechándose de la ignorancia y la miseria, comprar hasta a su madre que lo parió.
Ahí tendriamos ser honesto, funciona un tipo de saber que no necesariamente es inteligencia, sino una especie de tigueraje que al combinarlo con dinero, estrategia y promesas de mejoría, pues necesariamente logran en un gran porcentaje los resultados esperados.
Por eso es tan necesaria la educación política de los pueblos, para que estos adquieran las herramientas necesarias para poder combatir todas las diabluras que esos avivatos hacen en nombre de un desarrollo que no es tal y una humildad que no conocen.
Ya en los tiempos llamados muertos, es decir cuando la actividad político – electoral como que descae un poco, ahí muchos no usan ni una pizca de su llamada inteligencia y se ausentan de los pueblos hasta ver llegar nuevamente los tiempos de la cosecha….¡¡Que pena!!.